— Escucha, no me gusta dar sermones,
pero te voy a dar un consejo que siempre te va a servir:
En la vida te encontrarás muchos idiotas…
si te lastiman, di que es su estupidez lo que les empuja a hacerte mal.
Eso te evitará responder a sus acciones.
Porque no hay nada peor en el mundo que la amargura y la venganza.
Mantente digna e íntegra contigo misma.
Vas a ver. Todo estará bien.
No llores, piensa en tu futuro. Europa te espera.
Y cuando llegues a Viena, te comes un Sachertorte.
Es un pastel de chocolate, delicioso.
Y después te iremos a ver.
[…]